Para un buen ejercicio en narración improvisada, intente representar un cuento de hadas conocido en un minuto. Tanto las clases de teatro como los grupos de actuación pueden utilizar el “Cuento de hadas de 60 segundos” para perfeccionar las habilidades de improvisación. También es un gran juego para familias y niños.
Cómo jugar
El tamaño del yeso debe ser de al menos tres personas. (Cuatro o cinco sería lo ideal). Una persona actúa como moderador, una persona que interactúa con la audiencia y actúa como narrador, si es necesario. El resto del elenco son los intérpretes de cuentos de hadas.
El moderador pide al público sugerencias sobre cuentos de hadas. Con suerte, la audiencia gritará algunas excelentes opciones:
- Blanco como la nieve
- rapunzel
- La Sirenita
- Hansel y Gretel
- Bella Durmiente
- Caperucita roja
Luego, el moderador selecciona una historia que todos los miembros del elenco conocen bastante bien. Recuerde, narrativas como “Cenicienta” y “El patito feo” son más preferibles (y más interpretables) que oscuros cuentos de hadas de antigua Babilonia.
Comienza la actuación
Una vez elegida la historia, puede comenzar el espectáculo de 60 segundos. Para mantener la trama fresca en la mente de los artistas, el moderador debe recapitular rápidamente los eventos clave de la historia. He aquí un ejemplo:
MODERADOR: “Está bien, genial, escuché a alguien sugerir “Los tres cerditos”. Este es aquel donde tres Los hermanos cerdos construyen cada uno su nuevo hogar, uno con paja, el otro con palos y el tercero. con ladrillo. Un lobo feroz procede a demoler las dos primeras casas, pero no puede destruir la tercera. ¡Ahora veamos este famoso cuento de hadas representado para nosotros en 60 segundos! ¡Acción!"
Luego los artistas comienzan a representar la historia. Aunque intenten completar toda la historia en muy poco tiempo, aun así deberían crear personajes divertidos e interesantes. También deben establecer el entorno y el conflicto. Cada vez que los miembros del elenco disminuyen la velocidad, el moderador puede avisarles narrando un nuevo evento o simplemente leyendo en un cronómetro. Nada mueve más una escena que gritar: "¡Quedan veinte segundos!".
Variaciones
Aunque el ritmo rápido de este juego es muy entretenido, no hay nada de malo en probar una versión "más lenta" de cinco minutos. De esa manera, los actores pueden tomarse su tiempo y desarrollar más interacciones con los personajes y momentos divertidos.
Además, si el pozo de los cuentos de hadas populares se agota, no dudes en probar algunas de estas fábulas de Esopo:
- tortuga y liebre
- El ratón y el león
- El zorro y el cuervo
- El niño que gritó lobo
O, si al talentoso grupo de actores le gusta la cultura pop, intente presentar una película en un minuto. Mira lo que puedes hacer con películas como:
- Casablanca
- Guerra de las Galaxias
- El mago de Oz
- Grasa
- Lo que el viento se llevó
Como ocurre con cualquier actividad de improvisación, los objetivos son simples: divertirse, desarrollar personajes y pensar rápido.