Entonces, ¿ha aprendido a conducir una motocicleta y está pensando en comprar una bicicleta? Comprar una motocicleta usada es una excelente opción para el propietario de una bicicleta por primera vez, pero es importante elegir sabiamente para que no se quede atrapado con algo de lo que se arrepienta.
Estar preparado
En primer lugar, no se presente a un viaje de prueba sin estar preparado: lleve el equipo de seguridad no solo le mostrará al vendedor que eres un pasajero responsable, sino que también te protegerá en caso de que algo salga mal.
Es probable que los concesionarios le pidan que complete la documentación del seguro antes de sacar una bicicleta del estacionamiento, así que no se sorprenda si le piden que complete un formulario antes de salir a la carretera. Si va a comprar en una fiesta privada, asegúrese de estar interesado en la motocicleta antes de sacarla a dar una vuelta; no hay razón para arriesgarse innecesariamente a dañar la bicicleta (o usted mismo, para el caso).
Fácil en la bicicleta
Cada motocicleta es única y diferente tipos de bicicletas requieren diferentes técnicas de conducción.
Familiarízate y asegúrate de saber dónde está todo. ¿Están ajustados los espejos? ¿Está la palanca de freno al alcance? ¿Puede su pie encontrar fácilmente el pedal del freno trasero? ¿Sabe cuánto esfuerzo se necesita para activar y desactivar el embrague? Minimice la incertidumbre conociendo la configuración de la bicicleta antes de salir a la carretera.
Una vez que esté conduciendo, tómelo con calma, especialmente al principio. Accione el acelerador y los frenos con suavidad, y no haga movimientos bruscos. No solo es más seguro conducir con precaución, sino que también te hará más consciente de la dinámica de la bicicleta y de si quieres o no vivir con ella.
Acelerar, frenar y repetir
Navegar a una velocidad constante puede revelar ciertas cosas sobre el estado mecánico de una bicicleta, pero no le dirá todo lo que necesita saber. Una vez que se sienta cómodo con la forma en que la bicicleta responde a la entrada, intente acelerar y frenar. Preste atención a la forma en que embrague compromete; se resbala? ¿Cómo se siente el cambiador? ¿Es suave y los engranajes son fáciles de encontrar? ¿La entrega de potencia es de su agrado, es decir, el motor proporciona suficiente torsión en el extremo bajo para tirar fácilmente de los semáforos?
También debe intentar paradas repetidas y observar cómo funcionan los frenos. ¿Se sienten esponjosos? ¿Funcionan sin problemas? ¿Hay suficiente mordisco inicial para que se sienta seguro durante una parada de pánico? Si la bicicleta tiene frenos antibloqueo, pruébelos usando el freno trasero y asegúrese de que no se bloquee. Pulsar los frenos en bicicletas no equipadas con ABS puede significar que los rotores están deformados, así que tenga cuidado si aparece esa irregularidad.
Sentir el manejo
Una vez que haya probado los frenos de la bicicleta, intente girar y observe cómo se maneja la motocicleta. ¿Se revuelca o se siente poco amortiguado? Eso podría significar que sus amortiguadores se están agotando o podría ser una bicicleta menos que deportiva; cruceros Por lo general, ofrecen paseos más cómodos que las bicicletas deportivas, así que tenga en cuenta la diferencia.
Teniendo en cuenta el tipo de bicicleta que está probando, preste atención a sus características de manejo. ¿Tira hacia un lado más que hacia el otro? Si es así, el marco podría estar doblado. ¿Raspa alguna pieza cuando gira? Es posible que las clavijas ajustables estén más bajas de lo necesario o que la bicicleta se haya bajado. ¿Hay un bamboleo? Eso podría significar que una llanta está desequilibrada. ¿Se siente sensible o entumecido?
Prestar atención al manejo de la motocicleta ayudará a determinar si es la bicicleta adecuada para usted.
Escuche atentamente
Las pistas audibles pueden hacerle saber qué partes pueden necesitar atención y evitar costosas reparaciones en el futuro:
Amortiguadores
Con la intención de suavizar la conducción sobre superficies irregulares, los amortiguadores pueden producir ruidos de traqueteo o chirridos cuando se desgastan, lo que puede comprometer el manejo y crear un problema de seguridad.
Cojinetes de las ruedas
Empaquetados dentro de los cubos de las ruedas para reducir la fricción y soportar las fuerzas de carga, los rodamientos pueden emitir un zumbido cuando han pasado su mejor momento.
Frenos
Algunos chirridos de los frenos pueden ser normales, pero un ruido excesivo, especialmente después de que los frenos se calientan, puede indicar la necesidad de un cambio de pastillas y / o rotores gastados.
Cansada
También querrá escuchar los sonidos de escape inusuales, ya que un silenciador perforado será inusualmente ruidoso y la corrosión por óxido puede afectar la función del sistema de escape.
Piense ergonómicamente
Las motocicletas usadas ofrecen muchas más oportunidades para pruebas de conducción, así que aproveche eso y busque posibles problemas ergonómicos. Intente pasar más de un par de minutos en la motocicleta para ver si la bicicleta puede resultar incómoda a largo plazo. ¿Están los manillares demasiado lejos? Si es así, ¿son ajustables? ¿La silla de montar se siente rara? ¿Están los reposapiés demasiado atrás? ¿Los instrumentos son fáciles de leer? Todas estas variables encajan en la ergonomía de la bicicleta y son cruciales para que disfrute de su compra potencial. Considere esos factores y pase el mayor tiempo posible en el sillín antes de comprometerse con una motocicleta.