Comprender su flujo de caja es crucial para administrar un restaurante o cualquier pequeña empresa. En pocas palabras, esa es la cantidad de efectivo que ingresa versus la cantidad de efectivo que sale diariamente, semanalmente y mensualmente. Si no comprende este concepto básico, corre un riesgo financiero.
Entrada y salida de efectivo
Para controlar su flujo de caja, tenga en cuenta lo que debe actualmente, digamos por la semana. Calcule todas las facturas que se avecinan, como pagos de alquiler o préstamos bancarios, y las cantidades que espera pagar por alimentos, otros suministros y salarios.
Ahora compare esa cifra con sus ventas previstas para la semana. Para ayudarle a estimar las próximas ventas, debe ser diligente en mantener revisiones comerciales diarias actualizadas.
No confíes en el crédito
Muchos proveedores de alimentos ofrecen a los clientes establecidos una cierta cantidad de crédito. Puede ser una cantidad en dólares o una cantidad de tiempo. Por ejemplo, es posible que recibas una entrega de comida el lunes y no tengas que pagarla hasta el lunes siguiente.
Esto puede resultar útil cuando se acerca una gran función de catering y necesita comprar comida antes de que le paguen. Sin embargo, trate de no acostumbrarse a atribuirse el mérito. Y comprueba si tus proveedores te harán un descuento por pago inmediato. Algunos proveedores lo hacen de forma rutinaria. Tienen sus propios problemas de flujo de caja de los que preocuparse.
Mantenga un alijo de efectivo
Al igual que una casa, un restaurante conlleva muchos gastos inesperados. Reparar o reemplazar un equipo roto puede costar cientos o miles de dólares. Mantenga una reserva de dinero en efectivo a un lado para poder solucionar estos problemas.
Mantenga el inventario bajo
Esté atento a su inventario para asegurarse de no comprar en exceso constantemente alimentos y licores cada semana. Si tiene inventario adicional en su vestidor o almacén seco que simplemente no se mueve, puede que sea el momento de actualizar el menú de su restaurante.
Tenga cuidado con los depósitos
Si tu restaurante ofrece algún tipo de catering, deberás realizar un depósito para reservar la fecha. Dependiendo de su política de catering, es posible que necesite entre el 10% y el 50% como depósito.
Reserve este dinero, incluso si faltan meses para la función. Si el cliente cancela con mucha antelación, deberá devolver al menos una parte del depósito. Y si el evento continúa según lo planeado, no querrás descubrir que has gastado ese depósito.
El negocio de la restauración requiere un buen ojo para los detalles. Eso también se aplica a tu presupuesto. Si bien no debe tropezar con los centavos para llegar a los dólares, siempre debe saber cuánto dinero ingresa y cuánto sale.